jueves, 16 de abril de 2009

Las cycas: fósiles vivientes



Se le conoce popularmente como Sagú, Palma de Sagú, Cica del Japón, Palma de iglesia… a una de las plantas de jardín más peculiares y elegante. Su nombre científico es el de Cyca revoluta y pertenece a la familia de las Cycadaceae.



Su nombre genérico científico deriva del griego «kykas» empleado por Teofrasto al referirse a una palma. Sin embargo, a pesar de su aspecto, estas no tienen nada que ver con las palmáceas, siendo como Cicadácea (junto con otras plantas como el Ginko biloba), una de las plantas más antiguas de la tierra, existía antes que los dinosaurios ya que cuenta con más de trescientos millones de años de antigüedad, hasta el extremo de denominárseles como verdaderos fósiles vivientes. La Cyca revoluta es originaria de las zonas del Japón, Indonesia, Vietnam y Malasia.

La planta de Cyca revoluta mantiene un crecimiento muy lento además de vida muy longeva… ¡más de 200 años!. Las flores de las Cycas revoluta son inflorescencias de conos unisexuales, existiendo por tanto plantas masculinas y femeninas. Las primeras poseen en su centro una piña mientras que las femeninas producen una masa de ovarios que tras la fertilización se convierten en semillas lanosas de color amarillo anaranjado y de tamaño considerable.
Las cycadas son unas reliquias vivientes. De las plantas con semilla más primitivas que tenemos en la actualidad. Con al menos más de 300 millones de años de existencia, aparecieron antes que los dinosaurios. En esta época eran un componente importante de la flora. A lo largo del Triásico y Jurásico, suponían el 20 % de la flora. Por eso tanto el Mesozoico como el Jurásico, son con frecuencia denominados ?Época de las Cycas?. Las Cycas junto con las Coníferas y las Ginkoales, fueron las plantas que dominaron en el Mesozoico. Los dinosaurios se alimentaban de ellas, y junto con éstos, tuvieron su esplendor durante el Jurásico. Fueron una de las principales fuentes de alimento para los Dinosaurios. En la actualidad no son tan abundantes y diversas. Las primeras, aparecieron en Pensylvania, llegando a extenderse desde Alaska y Siberia hasta el Antártico. Se han encontrado fósiles en cada continente; ésto fue posible gracias al clima cálido de aquella época. Las hojas de la foto nº1 son solo un ejemplo del material fosilizado encontrado. Han aparecido igualmente, conos, semillas, troncos etc... Entre los encontrados hay diecinueve especies de cycas ya extintas además de los once géneros que se conservan actualmente. Por su aspecto nos recuerdan a las palmeras y helechos. Son plantas muy longevas, hay un ejemplar en el Real Jardín Botánico de Inglaterra en Kew, de 200 años. La polinización en cycas que ha conseguido permanecer a lo largo de tanto tiempo, no puede deberse a un golpe de suerte; ni llevado unicamente acabo por el viento. Esto lo confirma la presencia de cycas en los bosques tropicales, donde no es frecuente ni intenso el viento. Diversos estudios han demostrado que apenas hay polen de cycas en el aire en estas zonas. Interacciones con otros seres vivos, o interacciones bióticas, juegan un importante papel en la biología de las cycas, y en especial en la polinización y dispersión de sus semillas. Así como la adquisición de nutrientes nitrogenados. Más recientemente se ha sugerido que los escarabajos, en concreto algunas especies de gorgojos y pequeñas abejas, pueden contribuir de forma más notoria en la difusión del polen. Las cicadáceas macho producen su polen en una enorme estructura de forma cónica que se desarrolla en el centro de una corona de hojas rígidas, parecidas a la de las palmeras. En aquel tiempo, ninguna planta de la Tierra había desarrollado aún flores de colores, pero sí otras estrategias como la de las cicadáceas; cuando el polen ya está listo para su distribución, estas elevan la temperatura de su cono central en más de dos grados, algunas en vez de elevar su temperatura producen un olor fuerte y desagradable. La elevación de temperatura atrae a los gorgojos, que aterrizan en el cono dándose un banquete con el polen derramado, quedando su cuerpo cubierto del mismo durante el proceso. Luego echan a volar hacía otras cicadáceas en busca de más alimento llevando el polen de la primera encima; y entregándolo a la segunda de un modo mucho más económico que si lo hubiese hecho el viento. Las semillas de las cycas son bastante grandes, y normalmente tienen colores llamativos: rojo, púrpura y amarillos son comunes. Estas semillas coloreadas se presentan en los conos maduros, los órganos fructíferos nacen separados unos de otros, los vivos colores atraen pájaros y una gran variedad de mamíferos que se ocupan gratuitamente de dispersar la semilla. Una de las más notables interacciones bióticas es la asociación con bacterias fotosintéticas como la ?Anabaena?. En las cycas, estas bacterias están refugiadas en raíces especiales modificadas, con el aspecto de corales, hecho que les da el nombre, ?raíces coralinas?. Estas raíces se desarrollan más fuera de la tierra que dentro de ella. Es esta exposición a la luz lo que necesitan para desarrollar su actividad. A cambio de proporcionarles las cycas este habitat adecuado a las bacterias, obtienen de estas nitrógeno. Las cycas crecen en un rango amplio de climas tropicales y subtropicales. Si bien su presencia no es tan significativa en la actualidad. En lo que sí destacan en su medio es en su tamaño. En la actualidad las cycas se encuentran en todos los continentes de forma silvestre excepto en Europa y Antártida; pero se ven restringidas a ciertas áreas en los trópicos y subtrópicos. Muchas cycas pueden crecer en exteriores en California y sur de Estados Unidos, pero no parecen tolerar el clima de otras zonas de este país. Hoy en día, solo un puñado de cycas permanecen, y muchas se enfrentan a una posible extinción en estado silvestre (ej. las ?microcycas en el Oeste de Cuba). Las razones por las que se ven amenazadas son que viven en hábitats en peligro , como los bosques tropicales. Y además que tienen un crecimiento muy lento y su reproducción es poco frecuente o exitosa. Igualmente son un peligro latente para su conservación, los coleccionistas sin escrúpulos. Algunas especies silvestres ya se han extinguido recientemente. De todas formas tienen a su favor, las que quedan, el atractivo de sus hojas y porte en general. Lo que las ha convertido en ejemplares codiciados para parques públicos y jardines particulares; convirtiéndose ambos en un refugio para ellas. Programas de reproducción de distintas especies, llevados acabo por distintos institutos, luchan por su conservación; viéndose dificultada por la necesidad de mantener la variedad genética presente en poblaciones naturales. En la actualidad cinco géneros están amparados por una Ley Internacional, que prohíbe la recolección tanto de semillas como de ejemplares completos de estas especies en sus hábitats naturales, y la comercialización de los mismos. Todos estos esfuerzos es posible que no sean suficientes para evitar su extinción. En el jardín Botánico de Florida, el ?Fairchild? se mantiene la colección de cycas más completa del mundo. Este paraíso ornamental, fue fuertemente azotado por el huracán Andrew en 1992, y la mayoría de las especies fueron seriamente dañadas o eliminadas. Un equipo de botánicos de Misuri se desplazó tan pronto lo permitieron las condiciones metereológicas en helicóptero al ?Fairchild?, con el fin de salvar tantas especies como fuese posible. En la actualidad son numerosos los centros de jardinería que tienen interesantes ejemplares de cycas, por citar alguno:?Carnavon National Park?, ?Fairchild?, etc.... Estos ?fósiles vivientes?, además de su perdurabilidad en el tiempo como especie, a nivel individual son plantas extremadamente longevas. Existe en la actualidad en el Royal Botanic Garden de Kew (Inglaterra) un ejemplar de más de 200 años. La Cyca revoluta es nativa de Japón, su nombre común es ?Sago Palm?. Su importancia es debida no solo a su interés como ornamental de interior y exterior, sino también como superviviente de una época en la que desaparecieron muchas especies tanto animales como vegetales. Es por ello por lo que hoy muchos estudios se orientan hacia esta familia, para conocer como realizan el intercambio gaseoso, fotosíntesis, etc..... ya que puede darnos claves y encaminar distintos estudios de ingeniería genética para aumentar la resistencia y adaptabilidad de distintas especies a condiciones ambientales adversas, en lo que han demostrado ser especialistas.

2 comentarios:

  1. HOLA, MUY INTERESANTE TU BLOG, EN VERDAD ME FASCINA ESTA PLANTA Y ME GUSTARIA APRENDER UN POCO MAS DE ELLA, YO TENGO 2 EJEMPLARES Y UNA CON HIJUELOS EN LA BASE QUE ME GUSTARIA SEPARARLOS Y PLANTARLOS EN MACETA PERO NO SE COMO HACERLO . SALUDOS

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  2. esta perfecta la informacion pero cual es la estructuras de estas cyca

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